Lucha por sueldo en Albany
El Diario
Por Annie Correal
30 de noviembre
Nueva York — Durante un año, un hispano de 62 años trabajó varias semanas sin pago de horas extra, en un cementerio para veteranos de la Segunda Guerra Mundial, en Brooklyn. Vicente, quien no quiso revelar su apellido, debido a su estatus inmigratorio, compartió su historia con legisladores en Albany ayer y en una entrevista con El Diario La Prensa.
"Muchas veces yo trabajé sábado, domingo, toda la semana seguida", dijo Vicente, de origen mexicano, quien removía pasto, sembraba y regaba el pasto en el cementerio Cypress Hills Veterans’ Cemetery. Cuando él se quejó este año, su empleador, Veteran’s of the Land, Inc., lo despidió, y ahora él está luchando en la corte por sus sueldos perdidos.
Preguntado si los empleadores se aprovechan de los trabajadores indocumentados, quienes frecuentemente no reportan el robo de salarios por miedo de ser deportados, Vicente respondió: "Esa es la realidad, y es lamentable".
Para cambiar esa realidad, Vicente y más de 50 personas afiliadas con la organización Make the Road New York viajaron de la Ciudad de Nueva York a Albany para presionar a los legisladores de aprobar el Acta de Ley para Prevenir el Robo de Salarios (Wage Theft Prevention Act), que penalizaría a aquellos empleadores que no cumplen con las leyes laborales del estado.
Estos recibieron el apoyo de los senadores estatales José Peralta y Diane Savio y el asambleísta Carl Heastie. Un sindicato de trabajadores de almacenes, The Retail, Wholesale and Department Store Union (o RDSWU, por sus siglas en inglés) también mandó representantes a Albany.
Dos versiones de la legislación están bajo consideración. La versión original del proyecto de ley fue aprobada por el Senado estatal y espera un voto en la Asamblea estatal. Una segunda versión fue presentada por la Asamblea y tendría que ser aprobada por la Asamblea y el Senado.
"No es algo que requiera mucha consideración, cualquiera de las dos debe ser aprobada", señaló Deborah Axt, organizadora en Make the Road New York. "Fue un día maravilloso", agregó Axt, "Los trabajadores se trasladaron a la capital para contar sus historias".
La ciudad de Nueva York está detrás de ellos. El 17 de noviembre, el Concejo Municipal aprobó una resolución para impulsar la legislación. Esa misma semana, trabajadores y ciudadanos marcharon en Manhattan para demostrar su apoyo a las víctimas del robo de salarios.
La ciudad falla en pagar un total de mil millones de dólares a sus empleados anualmente, según datos del National Employment Law Project diseminados por el Concejo Municipal.
Un empleado de bajos ingresos típicamente pierde alrededor de 3.000 dólares anualmente por robo de salarios, o el 15% de sus ingresos. Además, las consecuencias para empleadores que no cumplen con la ley son menores.
Dimas Pineda, un trabajador quien trabajó en el restaurante Plaza Garibaldi en Elmhurst, Queens, relató: "Varias veces le preguntaba por mi sueldo atrasado y mi patrón siempre me contestaba: ‘Mañana’. Pero mañana nunca llegó. Me tuve que salir del trabajo porque no tenía otra opción. No podía pagar la renta, la comida, ni sostener a mi familia".
Hasta recientemente, Pineda trabajó 12 horas al día, seis días por semana en el Restaurante Plaza Garibaldi en Elmhurst y sólo recibió la mitad del sueldo prometido, o $300.
Consultado sobre el pago que adeudan a Pineda, el gerente de Plaza Garibaldi, Noel García, dijo en una entrevista telefónica: "Según mi entender, él habló con el jefe y recibió parte de lo que le debía, hicieron un acuerdo de pago. […] Nunca se les ha dicho que no los van a pagar", indicó.
"Que venga a hablar conmigo", agregó.
Sin embargo, Pineda dice que el problema va más allá de su caso. "Lo que me pasó a mi ha pasado a muchos otros trabajadores, pero la mayoría de los trabajadores tiene miedo de defender sus derechos".