Incluyamos en el presupuesto los fondos para el Dream Act (Artículo de opinión publicado ayer en El Diario)

Adriano Espaillat

 Artículo de opinión publicado ayer en El Diario

Incluyamos en el presupuesto los fondos para el Dream Act

 

Por Adriano Espaillat

Senador Estatal de Nueva York

 

 

No incluir los fondos necesarios para el Acta del Sueño estatal (Dream Act) en el presupuesto, es una oportunidad que pierde el estado de Nueva York de proporcionar un alivio a los estudiantes que trabajan duro y que están atrapados en nuestro roto sistema de inmigración.

 

La designación de estos fondos es clave para la aprobación e implementación del Dream Act estatal, que serviría para financiar el programa de asis­tencia en la matrícula universitaria conocido como TAP. 

 

Según un reporte del Instituto de Política Fiscal, de aprobarse esta ley, unos 5,500 estudiantes indocumentados que sean elegibles, podrán tener acceso al Programa de Asistencia Educativa, que es financiado por el estado.

 

Los inmigrantes han sido durante mucho tiempo la columna vertebral de esta nación y este estado, y darles la espalda a ellos equivale a dar la espalda a los valores estadounidenses fundamentales. Es desalentador que a miles de inmigrantes indocumentados que se gradúan de las escuelas secundarias cada año les continúen negando el mismo acceso a la educación superior que tienen sus amigos y compañeros de clase. 

 

Invertir en la educación de estos estudiantes mejorará sus vidas, nuestras comunidades, nuestro gran estado, y hará que nuestro estado sea líder en la búsqueda de maneras de ayudar a estos estudiantes afectados por el mismo problema a lo largo del país.

 

Sin el Dream Act, muchos estudiantes talentosos, debido a los obstáculos financieros que enfrentan, no tendrán la misma oportunidad de tener éxito que los estudiantes que se sientan al otro lado de sus mesas. 

 

Dándoles a los estudiantes indocumentados una oportunidad justa, ampliamos las oportunidades, y la historia nos muestra que cuando expandimos las oportunidades nuestra economía crece, la clase media crece, y todos prosperamos.

 

Hoy me acuerdo del poema ‘Harlem’, de Langston Hughes, y su pregunta fundamental: ‘¿Qué le sucede a un sueño postergado?’ Y la no inclusión del Dream Act en el presupuesto estatal es postergar los sueños de miles de jóvenes indocumentados que merecen un futuro mejor a través de la educación.

 

Creo firmemente que, con conciencia y voluntad, este sueño se puede lograr.

 

En 2002, en un Senado Estatal controlado por los republicanos, logré la aprobación de la legislación que se asegura de que todos los neoyorquinos sean elegibles para matricularse en instituciones de CUNY y SUNY, sin importar su estatus migratorio, lo que ha sido descrito como la legislación precursora del DREAM Act. 

 

Si bien este presupuesto representa un paso atrás, no vamos a dejar de luchar hasta que se corrija esta injusticia.